Hola sr. Centeno: No me he ido. Aún. A punto he estado. Dos veces, dos. Pero aún estoy. Le dije que comentaría todas sus entradas, algún día. No sé si podré hacerlo; lo intentaré. Quizá, si usted quiere, sea hora ya de que me dé a conocer un poco; al fin y al cabo, durante un tiempo, ha sido este blog, uno de los pocos sitios donde aterrizaba. Un saludo de un Cuatralbo78 que tiene que aprender a vivir desde 0. Es usted un capullo con suerte.
Pensaba que había decido abandonar la lectura de mi blog cuando me centré en contar la historia de La chica de Los Planetas, ya que usted se solía ceñir a comentar los otros relatos que nada tenían que ver con el "reclamo" de esta página.
Siempre le pregunté por su identidad y siempre le dije que estaba deseando que comentara todas. Quiero que se dé a conocer un poco. Usted fue uno de mis primeros lectores y sobre todo uno de esos que comentaba cosas interesantes siempre.
Cuatralbo 78 no tiene pinta de tener que aprender a vivir desde 0.
Un saludo de un capullo que sí, que ha tenido suerte.
Hola sr. Centeno:
ResponderEliminarNo me he ido. Aún. A punto he estado. Dos veces, dos. Pero aún estoy. Le dije que comentaría todas sus entradas, algún día. No sé si podré hacerlo; lo intentaré. Quizá, si usted quiere, sea hora ya de que me dé a conocer un poco; al fin y al cabo, durante un tiempo, ha sido este blog, uno de los pocos sitios donde aterrizaba.
Un saludo de un Cuatralbo78 que tiene que aprender a vivir desde 0.
Es usted un capullo con suerte.
Estimado Cuatralbo:
EliminarPensaba que había decido abandonar la lectura de mi blog cuando me centré en contar la historia de La chica de Los Planetas, ya que usted se solía ceñir a comentar los otros relatos que nada tenían que ver con el "reclamo" de esta página.
Siempre le pregunté por su identidad y siempre le dije que estaba deseando que comentara todas. Quiero que se dé a conocer un poco. Usted fue uno de mis primeros lectores y sobre todo uno de esos que comentaba cosas interesantes siempre.
Cuatralbo 78 no tiene pinta de tener que aprender a vivir desde 0.
Un saludo de un capullo que sí, que ha tenido suerte.